Existe mucha curiosidad en torno al sexo anal. Bien sea por el porno, o por el boca a boca, la realidad es que esta es una práctica mucho más extendida de lo que parece. El problema es que la penetración anal no es tan sencilla como la penetración vaginal, y la falta de educación sexual, seguir consejos no especializados o guiarse por películas de ficción lleva a realizar pruebas fallidas. En muchas de ellas el sexo anal, sobre todo cuando hay penetración, acaba siendo doloroso, y convirtiéndose en una mala experiencia.