El pasado mes de octubre, The Washington Post adelantaba que hasta ocho compañías privadas habían comenzado a desarrollar bases de datos para recopilar información de todo tipo de los ciudadanos chinos. Todo ello con el objetivo de implementar, en un futuro cercano, un sistema de calificación ciudadana basado en la confiabilidad. Un sistema, que recuerda al que pudimos ver en el capítulo 'Nosedive' de 'Black Mirror', mediante el que el Gobierno pretende premiar o penalizar a sus ciudadanos en base a su comportamiento