Es la pócima mágica para el capitalismo en crisis. Según el economista Daniel Raventós, “eliminaría casi de golpe la pobreza”. Sus posibilidades son insospechadas. Es posible que la renta básica acabe con el cáncer, los maremotos y los accidentes de aviación. Puede acabar con todo. Si sigue el ejemplo de Extremadura y aprueba un decreto parecido en Madrid, el PP puede acabar con el capitalismo de un plumazo. La burguesía no da un palo al agua; sólo mira su cuenta corriente y sus beneficios, que se imagina que le llueven del cielo...