La sequía causada por El Niño descubrió las ruinas de Potosí, un pueblo enclavado en los Andes venezolanos que desapareció en los ochenta, sumergido por la construcción de un complejo hidroeléctrico en el norte del estado Táchira, fronterizo con Colombia. A 1.185 metros sobre el nivel del mar, en el descampado donde alguna vez existió Potosí, se avistan hoy la fachada de una Iglesia, los vestigios del cementerio y algunos bloques de lo que fueron viviendas.