Para evaluar si pagamos muchos o pocos impuestos, normalmente tendemos a fijarnos en la presión fiscal que nos dice el grado de recaudación sobre la economía, una ratio que relaciona los impuestos recaudados con el PIB, y es el indicador por excelencia. Si observamos los últimos datos, en España la recaudación de impuestos supuso en 2019 el 41,91% del PIB, este sería el dato de presión fiscal. No obstante, e1n ese dato tenemos 3,93 puntos que corresponden a la partida otros ingresos y que quedan excluidos en la comparativa internacional.