El presidente del PP se escuda en un antepasado que fue rehabilitado por la dictadura para oponerse a la exhumación de Franco. Su abuelo, medico de profesión condenado a 30 años, muy pronto, en 1941, salió de prisión, cuando había cumplido dos años y medio de los 30 de condena. Muy lejos su situación de los que sí acabaron en una cuneta. En 1956 se borraron sus antecedentes. Y en 1961, en el ABC ya aparecía sin ningún problema, integrado y destacado entre la clase dirigente del régimen, siendo por tanto un destacado franquista de brazo en alto.