Tres mujeres sufrieron severos daños permanentes en la visión después de inyectarse células madre en sus ojos, en un tratamiento no probado en una clínica privada de Florida, informaron los médicos en un artículo publicado el miércoles en The New England Journal of Medicine. Una de ellas, de 72 años, se quedó completamente ciega a causa de las inyecciones, y las otras dos, 78 y 88, perdió gran parte de su visión. Antes del procedimiento, todas ellas padecían alguna incapacidad visual pero podían ver lo suficiente como para conducir.