Ayer entró en vigor en Alemania la ley que, finalmente, permite la celebración de bodas homosexuales en el país. Estrenaron el registro Bodo Mende y Karl Kreile, que se casaron en el barrio berlinés de Schöneberg. El consistorio decidió abrir sus puertas en un día festivo, algo que es poco habitual en el país, pero sirvió para poder estrenar la ley en su primer día de validez. “Por fin dejamos de ser una pareja de segunda clase”.