¿Has oído algo acerca del hombre que entró en el aeropuerto de Nueva Orleans con explosivos y un machete? ¿No? Bueno, te habrías enterado si hubiera sido musulmán.

Los prisioneros franceses que piden que un testigo de Jehová los visite tienen ahora los mismos derechos que los prisioneros que pertenecen a otras religiones.

La Fiscalía pide 13 años de cárcel para doce presuntos miembros de una red de estafa piramidal que dilapidó los ahorros de cerca de 2.000 inversores, entre ellos más de 700 testigos de Jehová que confiaron en la trama porque la dirigían líderes de sus comunidades de culto. El fiscal Emilio Sánchez Ulled acusa a doce de los acusados de los delitos de estafa e insolvencia punible y pide al tribunal que les obligue a devolver los ahorros estafados a los inversores, que inicialmente se estiman en cerca de 38 millones de euros.

Un juez de la Corte Superior de San Diego ordenó una compensación de 13 millones y medio de dólares para una víctima de abuso sexual por parte de un ministro de la organización religiosa Testigos de Jehová. La víctima, José López, de 38 años, fue notificado el viernes pasado de la orden del juez Joan M. Lewis, contra la organización religiosa a 30 años de haber sufrido abusos y violaciones de parte del ministro Gonzalo Campos, quien era su maestro de estudios bíblicos.

La policía inglesa ha dado la voz de alarma y continúa buscando a un niño de cinco años, Ashya King, a quien sus padres han sacado este jueves de un hospital de Southampton sin permiso médico, publica este viernes The Independent. El pequeño sufre de un tumor cerebral y los médicos temen por su vida. "Si Ashya no recibe atención médica urgente o se le de da un tratamiento equivocado, su vida se pondrá en riesgo".

El pequeño de cinco años tiene un tumor cerebral y necesita atención médica con urgencia. Se lo llevaron del hospital de Southampton y sospecha que está en Francia. Aunque no se conocen claramente las razones de esta huida, se cree que puede tener que ver con el hecho de que los padres, Brett King (51 años) y Maghemeh King (45), son testigos de Jehová.

"Este es un controvertido tratamiento... en este caso porque la madre es testigo de Jehová y se encuentra incapaz, en virtud de sus principios religiosos, a dar su consentimiento a este tratamiento", dijo el magistrado Cobb. "Sin este tratamiento, las perspectivas el niño de recuperarse son escasas."

Estaba hospitalizada en el San Roque por una úlcera intestinal. La familia intentó lograr la transfusión mediante un amparo, pero fue rechazado.

Mire como los testigos de Jehová enseñaron por décadas que la Generación de 1914 no moriría antes del Fin engañando asi a millones de personas