La asociación funcionarial Defiendo mi Derecho y la Gestión Pública, contra la Ley del Enchufismo del gobierno Griñán, acusó de "operación de propaganda" a la estrategia urdida en torno a la Ley de Transparencia del bipartito PSOE-IU. Según su presidenta, G. Bermejo, es "una grandísima aberración (...) una ley de transparencia para garantizar la opacidad", ya que supone la creación de dos órganos para colocar amiguetes y correligionarios serviles.