El Buque de Vigilancia del Litoral (BVL) GC 23 Naiguatá de la Armada Bolivariana se hundió el lunes 30 de marzo a las 00:45 horas al noroeste de la Isla Tortuga a causa de una colisión con el buque de pasajeros Resolute de bandera portuguesa. Los 44 tripulantes fueron rescatados y están a salvo. El buque fue construido en Navantia San Fernando. El ministro de defensa venezolano consideró la acción del Resolute "cobarde y criminal" por no asistir al rescate.

El submarino del futuro de la Armada supera una fase crucial: navegará semanas sin salir a la superficie Abengoa incorporará el sistema de propulsión anaerobia basado en pila de hidrógeno a los sumergibles de la clase S-80 desarrollados por Navantia.

La gestación del programa S-80 ha sido, si cabe, más larga y compleja de lo que habitualmente se admite. De hecho, no comienza en 1989, como figura en la web de la Armada, sino a principios de esa década. Fue entonces cuando, entre otras opciones, se consideró muy seriamente desarrollar un submarino nuclear para el que incluso se llegó a acuñar un acrónimo: el SUBESPRON (SUBmarino ESpañol de PROpulsión Nuclear).

Navantia se queda sin construir cuatro S-80 holandeses. La marina real (Koninklijke Marine) y el Ministerio de Defensa de los Países Bajos han decidido excluir a la empresa naval española del proceso para encargar la construcción de submarinos.

Un hombre de 39 años, Andrés Vías, vecino de Puerto Real, ha muerto a primeras horas de esta mañana en los astilleros de Navantia-San Fernando mientras trabajaba en uno de los bloques de las corbetas que se construyen para la Marina saudí. Por el momento se desconocen las causas del fallecimiento aunque el incidente ha tenido lugar mientras el operario trabajaba en el interior de uno de los tanques, según han explicado a este medio operarios de la factoría.

El embargo de armas que España anunció ayer que impondrá a Turquía por su intervención militar en Siria tendrá una excepción de gran tamaño, la del buque de asalto anfibio LHD 'Anadolu' que un consorcio hispano-turco está construyendo en el país otomano con la tecnología y asistencia técnica de Navantia.

El embargo de armas que España anunció ayer que impondrá a Turquía por su intervención militar en Siria tendrá una excepción de gran tamaño, la del buque de asalto anfibio LHD 'Anadolu' que un consorcio hispano-turco está construyendo en el país otomano con la tecnología y asistencia técnica de Navantia.

Entre las empresas de montaje sancionadas por la CNMC por crear un cartel industrial figura Maessa, cuya división de negocio naval trabaja con Navantia

Se han detectado vulnerabilidades en el vallado del recinto de Algameca, justo al lado de donde atracan los submarinos españoles

La polvareda levantada al poco de llegar Pedro Sánchez a La Moncloa por los contratos de venta de armas del Gobierno de España con el régimen de Arabia Saudí no ha impedido que las relaciones bilaterales en el campo de la industria militar continúen rindiendo sus frutos. La presidenta de Navantia, Susana de Sarria, acaba de rubricar esta semana en Londres un contrato de transferencia de tecnología militar con el Gobierno saudí que reportará en torno a 900 millones de euros a los astilleros públicos.

Navantia gastará más de 180 millones de euros para abordar la prejubilación de 2.207 empleados de más de 61 años entre este año 2019 y 2022. El astillero público, cuya propiedad es 100% de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), ha dotado una provisión por un total de 181.142.000 euros (160.670.000 a largo plazo y 20.472.000 a corto plazo) en sus últimos resultados de 2018.

Arabia Saudí ha fichado al expresidente de Navantia Esteban García Vilasánchez como directivo de su empresa estatal SAMI (Saudí Arabian Military Industries), creada en 2017 con el propósito de convertirse en unas de las 25 principales firmas de armamento del...

Riad ha fichado al ejecutivo español Esteban García Vilasánchez (Mugardos, A Coruña; 52 años) para la cúpula de SAMI (Saudí Arabian Military Industries), la compañía de armamento a la que quiere convertir en una de las 25 mayores del mundo en una década. Vilasánchez, que desarrolló su carrera profesional en Navantia, fue presidente del astillero público entre 2014 y 2018 y firmó la venta a Riad de cinco corbetas por 1.800 millones durante la visita a España del controvertido príncipe heredero Mohamed Bin Salman (MBS), en abril del año pasado.

Soldadores de Navantia fueron los culpables del aparatoso incendio que se produjo en el portaeronaves Juan Carlos I (L-61), el buque insignia de la Armada española, hace unos meses mientras se encontraba en la base naval de Rota. Es la principal conclusión de la investigación interna que abrió el Ministerio de Defensa tras el accidente y que concluye que operarios contratados por la empresa pública dependiente de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) fueron los responsables de los daños ocasionados por el fuego.

El holding público ya ha consumido una cuarta parte de ese colchón de seguridad en lo que va de año con inyecciones en Navantia y Cofivacasa. El pasado 1 de marzo el Consejo de Administración del hólding estatal decidió dar un préstamo participativo de 215 millones de euros a Navantia para cubrir el desequilibrio patrimonial de 26 millones de euros que se puso de manifiesto al cierre del ejercicio de 2018. Con esta nueva inyección de recursos, el Estado ha empleado ya más de 800 millones de euros desde el año 2015

Este plan industrial, que fue aprobado a finales del pasado año 2018, está siendo desplegado por la empresa en base a sus tres pilares: El Plan Comercial y de Operaciones, que aspira a "dotar de suficiente carga de trabajo a todos los centros"; el Plan de Eficiencia Operativa, que "impulsa la transformación digital hacia el astillero 4.0; y el Plan de Rejuvenecimiento y de formación de la plantilla y nuevo convenio único, que "permitirá 1.658 incorporaciones".

Cádiz tendrá más carga de trabajo. Tras la construcción de los primeros barcos para Arabia Saudí, la bahía gaditana tendrá ahora que desarrollar la torre Tizona: una torre de 30 mm no tripulada de alta precisión creada por Navantia,

El corte de la primera plancha de chapa marcará el comienzo de este proyecto, que se prevee que termine en 2022 con la entrega del último de los buques a la Armada saudí, según ha explicado Navantia. El contrato con la Armada saudí beneficia al conjunto de factorías de Navantia

Navantia ha ofrecido a los sindicatos la contratación de 1.685 trabajadores y una inversión anual de 95 millones de euros hasta 2022. La empresa además ha propuesto la salida pactada de 2.200 empleados a lo largo de los próximos cuatro años por medio de la prejubilación de mayores de 61 años.