La pobreza como noticia siempre aparece asociada a sus consecuencias, pero es raro enfrentarla como un todo, un problema que, con diferente intensidad, afecta a un 21,5% de la sociedad española, con datos que hablan de al menos una de cada cuatro personas dentro de la exclusión social. Otros datos son aún peores, como el de pobreza infantil que nos sitúa a la cabeza de la UE solo superados por Rumanía. Todo esto con un crecimiento económico de un 17% en cuatro años. La odiosa comparación entre la macroeconomía y el vulgo.