Ahora todos exigimos que se busque a los culpables de este desastre, pero, ¿quiénes son los culpables? Culpable es el que prende la cerilla, por supuesto, pero también los que hacen leyes que no castigan al incendiario y favorecen, por desidia o por electoralismo, que sigan quemando, o que ponen trabas a la investigación de incendios (en una próxima entrada hablaré en detalle de este tema). Culpable es el vecino que conoce al que incendia pero calla, culpable es la prensa sensacionalista, analfabeta e incendiaria, nunca mejor dicho.