Desde 2011 le obligan a trabajar 6 meses entre bajas, aunque sus compañeros niegan esta versión y dicen que solo aparece media hora los jueves. "Es un bajista de profesión, un absentista patológico", denuncian los sindicatos. Repite periódicamente la misma actuación: después de que un médico le firma un parte de baja, el funcionario agota el tiempo máximo de baja hasta que la Seguridad Social le comunica que ha de reincorporarse y entonces al volver al trabajo pide las vacaciones que no ha disfrutado y vuelta a empezar presentando otra baja