Una novia recién casada tuvo que ingresar en un hospital del Reino Unido después de experimentar un orgasmo continuo, de más de dos horas, que la tenía prácticamente agotada, por lo cual su marido decidió ponerla en manos de los médicos. La historia, publicada en 'The Mirror' la semana pasada, acabó con el matrimonio en urgencias y con unos doctores desconcertados.