La acción militar estadounidense y británica, apoyada por Australia, Baréin, Canadá y los Países Bajos, se produjo en respuesta a los ataques hutíes a embarcaciones en el mar Rojo con motivo del genocidio israelí en Gaza.

Decenas de miles de yemeníes se reunieron el viernes en varias ciudades para escuchar a sus líderes condenar los ataques estadounidenses y británicos contra su país en respuesta a los ataques de militantes Houthi contra la navegación en el Mar Rojo.

El portavoz de operaciones militares de los hutíes, Yahya Sari, ha manifestado en un comunicado en su cuenta en Telegram que "el enemigo estadounidense-británico ha lanzado una brutal agresión en el contexto de su apoyo a la continuación de los crímenes israelíes en Gaza" y ha detallado que Washington y Londres han llevado a cabo un total de 73 bombardeos contra el país.

Estados Unidos sigue intentando convencer a España para que se sume a la operación internacional en el mar Rojo para combatir la amenaza de los rebeldes hutíes, pero el Gobierno se mantiene firme en que no participará en la misma aunque está dispuesto a respaldar una eventual misión de este tipo en el marco de la OTAN o la UE. "Debido a la estrecha asociación entre EEUU y España, esta llamada se programó desde varias semanas antes (...)" ha explicado la Embajada, subrayando que "España es un aliado, socio y amigo indispensable" de Washington.

El destructor de la Marina iraní 'Alborz' ha entrado en el mar Rojo a través del estrecho de Bab al Mandab en lo que el Ejército de la República Islámica ha caracterizado como una maniobra rutinaria de protección en medio del repunte de la tensión por los ataques de la insurgencia hutí a los cargueros que navegan por la zona.

El Comando Central Naval de Estados Unidos (CENTCOM) anunció que respondió a un ataque con fuego de los rebeldes chiíes hutíes en el mar Rojo y hundió tres barcas de los atacantes, lo que marca las primeras víctimas del movimiento yemení en una confrontación directa con las fuerzas estadounidenses en esta vía marítima.

Los buques de guerra respondieron a la llamada del Maersk Hangzhou cuando recibieron fuego de la parte de Yemen controlada por los rebeldes Houthi, dice el Mando Central de EE.UU.

Se ha viralizado un vídeo de un ferry ardiendo al ser supuestamente atacado por los hutíes en el mar Rojo, pero las imágenes son antiguas.

Los rebeldes hutíes de Yemen han valorado positivamente que el Gobierno de España haya descartado apoyar la Operación 'Guardian de la Prosperidad' impulsada por Estados Unidos para crear una alianza de países que garanticen la libre navegación en el sur del Mar Rojo y el Golfo de Adén. Así lo aseguró en un mensaje a través de sus redes sociales el líder hutí Hussein Al-Ezzi, que ostenta el cargo de viceministro de Asuntos Exteriores de los rebeldes apoyados por Irán.

Grupos rivales se comprometen a un nuevo alto el fuego y a participar en el proceso de paz dirigido por la ONU para poner fin a nueve años de guerra.

La influencia de las potencias extranjeras ha convertido a Yemen en un campo de batalla proxy entre Arabia Saudí e Irán. Actualmente los Hutíes controlan una gran parte de Yemen. Sin embargo son conscientes de que su supervivencia como gobierno de facto de una parte de Yemen solo está asegurada si Irán sigue financiándoles y apoyándoles con muchas armas, por eso los Hutíes actúan como títeres de Iran. E Irán los utiliza a su antojo para presionar a otros gobiernos, por ejemplo...

Se está llevando a cabo una movilización general en el norte de Yemen para enviar soldados a la Franja de Gaza si surge la oportunidad, dijo el miércoles a Sputnik Houtham Assad, miembro de la oficina política del movimiento rebelde yemení Ansar Allah, también conocido como los hutíes.

"Aunque EE.UU. consiga movilizar el mundo, nuestras operaciones militares no terminarán hasta que se ponga fin a los crímenes de genocidio en la Franja de Gaza y se permita que lleguen alimentos, medicinas y combustible a la población asediada, sin importar los sacrificios que nos cueste", escribió en su cuenta de Twitter. Al Bukaiti aseguró que los hutíes "no abdicarán de la responsabilidad de proteger a los oprimidos de la tierra", como "Dios todopoderoso ordenó".