Desde que la Corte Suprema de Estados Unidos restableció la pena de muerte en 1976, Virginia, con 113 ejecuciones, ocupa el segundo lugar después de Texas, según los datos recogidos por la cadena de televisión estadounidense NBC. A pesar de que esta ley todavía necesita la firma del gobernador demócrata del estado, Ralph Northam, este ya ha asegurado que la firmará, convirtiendo así a Virginia en el estado número 23 que prohíbe la pena capital.