Rusia vetó una prórroga de un programa de ayuda humanitaria de Naciones Unidas para Siria, de vital importancia, mientras grupos de ayuda y diplomáticos advertían de una posible catástrofe. Un programa de la ONU para hacer llegar alimentos, medicinas, refugio y otras ayudas a unos 4 millones de personas en el noroeste de Siria, controlado por la oposición, está en marcha desde 2014. Los diplomáticos han luchado por ampliar el actual mandato del Consejo de Seguridad de la ONU que autoriza el mecanismo, que expira el 10 de julio.