Se preguntará acaso: ¿Cómo aumentar electoralmente un 3% el apoyo al procés para alcanzar el ansiado 51%? Caben muchas maneras de hacerlo, es cierto. No queda nada, o muy poco, por descubrir. Los métodos son los mismos que los empleados para lograr el histórico y tembloroso gatillazo del 48%. Pero quizás haya un cambio: que los políticos nacionalcatalanistas y sus intelectuales orgánicos estén ya convencidos de que sólo con poner el énfasis en uno de ellos culminarán la soñada cima del monte.