Rosa Delia, de 58 años, vivía en Agaete y contó su devoción por Isabel Pantoja en un programa de Televisión Canaria, Buenas tardes, Canarias. Allí dijo que, muy a su pesar, no iba a poder acudir al concierto de su ídolo por su poca capacidad económica, por lo que desde la dirección del programa se pusieron en contacto con la oficina de la cantante donde su sobrina, Anabel Pantoja, se ocupó de conseguir una invitación personal de la artista.