La denuncia de la exabogada de Podemos, Mónica Carmona, entregada al juzgado que investiga el caso Neurona arroja nuevas sospechas sobre la actividad interna del partido. A lo largo de 2019, Carmona, encargada de revisar el cumplimento normativo de la formación, recibió una denuncia de un supuesto pago de 300.000 euros que, a través de la fundación de Podemos, iba a “cursos de formación política” sin dejar rastro alguno. La abogada empezó una investigación interna sospechando que se tratase de una “tapadera”. Pero fue despedida.