Como si fueran unos adolescentes adictos a la adrenalina o un arqueólogo con el sombreo Fedora calado hasta los ojos, hay chimpancés que muestran un comportamiento más temerario y aventurero que el resto. Chimpancés que han sido invadidos por un parásito diminuto, un protozoo llamado Es decir, que el parásito vuelve audaz y despreocupado al chimpancé para que, en caso de toparse con un leopardo, por ejemplo, no huya fácilmente.Así el leopardo se comerá el chimpancé. Y los ovocitos del parásito llegarán al sistema digestivo del felino..