El 4 de diciembre de 1935, ante 54.000 espectadores, se disputó un partido amistoso entre las selecciones inglesa y alemana de fútbol. Nada destacable, sino fuera por el hecho de que en aquel momento Alemania estaba gobernada por Adolf Hitler. El himno y la bandera de la esvástica se alzó aquel día en White Hart Lane, campo del Tottenham Hotspur, ubicado en una zona con una importante comunidad de judíos ortodoxos.