En el epílogo de un largo proceso judicial, la transnacional Lafarge –número uno mundial de la producción de cemento–, rebautizada LafargeHolcim en 2015 y renombrada Holcim Ltd desde 2021, se declaró finalmente culpable, en Estados Unidos, de haber permitido que su filial en Siria trabajara para los yihadistas del Emirato Islámico (Daesh) y tendrá que pagar una multa de 778 millones de dólares. El proceso judicial terminado en Estados Unidos es diferente del que todavía se desarrolla en Francia, donde la transnacional está acusada