El autor critica la contradicción en las propuestas del Gobierno en relación a la semana laboral de 4 días y las reformas de las pensiones; a saber, se promueve la reducción de la semana laboral como una forma de mejorar las condiciones de trabajo y conciliar la vida personal y laboral, a la vez que el ministro Escrivá fundamenta sus cálculos para la reforma de las pensiones en supuestos que implican trabajar hasta cerca de los 70 años. Históricamente, al contrario que ahora, la izda. defendió la idea de jubilarse cuanto antes como un avance.