Los expertos explican que el daño ya es inevitable. Hubo ayer un apagón en Moncloa y, además de Bolaños, sólo intervino Isabel Rodríguez, la portavoz, y lo hizo en defensa de los jueces por las críticas de Irene Montero. Pero sobre el antídoto al escándalo, cuando ya son 14 los agresores beneficiados, Bolaños sintetizó la impotencia en una frase: «Estamos ante un debate jurídico que se debe resolver con argumentos jurídicos». Descarta una solución política.