Tres veces más fuertes que los actuales imanes superconductores basados en hierro, este desarrollo podría hacer que las máquinas de resonancia magnética sean más pequeñas y más baratas que nunca. También se pueden utilizar en la próxima generación de transporte, incluido el sistema ferroviario SCMaglev en Japón.
dx.doi.org/10.1038/s41427-024-00549-5