Lo último en Estados Unidos son unos calzoncillos para proteger la zona genital de los hombres, pero no pensada para jugadores de rugby ni nada de eso, sino para un deporte de contacto más peligroso todavía: cuidar de tu hijo pequeño. Los calzoncillos que prometen acabar con el dolor por las patadas y golpes en esa zona tan delicada se llaman Fridaballs, cuestan unos 24 euros y para conseguirlos, hay que apuntarse a una lista de espera, porque ha sido tal el éxito de estos calzoncillos que se han agotado.
|
etiquetas: genital , calzoncillo , patada , niño