Llegó el 1 de octubre, la fecha que cambió la historia del rock. Chandler y Hendrix acudieron a la Universidad Politécnica de Londres, donde Cream daría uno de sus grandes conciertos; durante el intermedio, el manager llevó a Jimi tras bastidores para cumplir su promesa. Hendrix, quien sólo soltaba su guitarra para ir a dormir, saludó uno por uno a los músicos que admiraba y de repente ocurrió lo inesperado, una osadía a la que nadie se había atrevido; Jimi pidió tocar con Cream en el escenario. Como un favor a Chandler, aceptaron.