Hace poco más de una semana, tuve que hacer un viaje de Cáceres a Mérida y cogí mi primer Bla bla car. Fue una experiencia cuanto menos curiosa. Legalmente, y aunque ya se sabe que los bla bla car no son legales, es la primera vez que montaba en uno. Sin embargo, ese tipo de viaje lo había realizado y lo había visto realizar cada vez que estaba en una parada esperando un autobús y aparecía un coche que ofrecía llevarte por menos dinero o por la misma cantidad a tu destino, pero a cambio te ofrecía más rapidez y comodidad.