Poco podía imaginar esta estudiante de 24 años que un juguete sexual podría hacerla pasar un rato tan malo, y casi sin darse cuenta. Y todo porque la chica, después de haber disfrutado un rato de su vibrador se empezó a poner nerviosa cuando, al no encontrarlo, se dio cuenta, después de pensar que su novio se lo habría escondido, que estaba dentro de su ano, algo que descubrió cuando empezó a vibrar.