El youtuber que dio galletas rellenas de pasta de dientes a un sintecho declara que "Todo era en plan de coña. Vosotros vais muy a tope con la ley". Kanghua Ren se comporta en la sala de vistas como si estuviera en su canal de YouTube: vacila al fiscal —le dice que es un “señor serio” que tal vez no entiende sus bromas—, tutea a los abogados y lanza preguntas impertinentes (“¿pero, esto, de dónde lo habéis sacado?”) cuando es él quien debe responderlas. La juez, que no está para tonterías, le advierte nada más empezar.