España está en máxima alerta. Dos peligrosos titiriteros andan sueltos. A pesar de haberles quitado sus armas, dos marionetas y un tambaliche de madera con cortinas viejas y sucias, los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado están muy atentos a sus movimientos. Incluso el 'Santo' Ministro de Interior, ha pedido a su homólogo de Defensa que tenga al ejercito preparado por si tuvieran que intervenir.