Internet llora por un hombre derrotado. Un enamorado que se ha chocado de lleno contra el capitalismo en el momento más importante de su vida. Un ser arrebatado de la magia que siempre albergó al pedir la mano de su novia en Disneyland, frente al castillo de la Bella Durmiente, en un mundo de ilusión y color. Hoy muchos internautas hemos asistido a una escena que queremos borrar de nuestra memoria rápidamente, en la que el bueno no gana. Hoy hemos vivido una injusticia, en mayúsculas. El villano de esta trágica historia: un empleado de Disney.