Sábado por la mañana. Oficina de la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil. Madrid. El joven cabo Bedoya deja su taza bruscamente sobre la mesa, derramando sin querer un poco de café sobre la alfombrilla con el logotipo de la benemérita. A pesar de llevar sólo tres semanas en el cuerpo, Bedoya es por una carambola de gripes de unos y fin de semana libre de otros, el responsable esa mañana de la cuenta en twitter de la Guardia Civil y acaba de recibir una mención en la cual un usuario denuncia amenazas de varios usuarios contra ciudad