No sabría deciros exactamente desde cuando empecé a fijarme en la lencería femenina, pero os aseguro que desde muy corta edad. Quizás desde los 12-13 años. La cosa es que de los recuerdos más tempranos que me llegan a la mente son de mi tia (la hermana menor de mi madre). Vino a vivir con nosotros un mes por problemas con los abuelos. Ella tendría 30 años. Yo ya os digo: 12-13 años. Como no había mucho sitio en la casa decidieron poner un colchón en el suelo de mi habitación y dormir yo allí... y cederle mi cama a mi tia. Osea dormía en la ...