La Fiscalía General del Estado española ha denunciado que las señales que pueblan a millares las calles y carreteras del país están mal y va a haber que ir cambiándolas. No son inclusivas. Una denuncia necesaria a la que Rufino y un servidor nos sumamos. Pero vamos un poco más allá. Queremos contribuir a visibilizar el problema y aportar nuestro granito de arena, es decir, nuestras propuestas de señales nuevas que incluyan a todas, a todes y, dependiendo del humor que nos pille, también a todos.
