Series como Hora de aventuras, El asombroso mundo de Gumball e Historias corrientes se han convertido en un fenómeno con cientos de fans niños y adultos. Impulsados por el anhelo de realizar dibujos animados inteligentes y de calidad —"como los de antaño"—, un considerable número de creativos, todos rondando la treintena, han popularizado una corriente en la que imperan la imaginación, el surrealismo y la psicodelia.

Cuando en Jason Blum recibió una copia de Paranormal Activity, la película estaba destinada a salir directamente al mercado de DVD. Parecía lógico. Era una película de presupuesto irrisorio, firmada por un desconocido. Había sido rodado en una semana, sin guión y con una cámara casera. Pero la intuición le dijo que su potencial comercial era mucho mayor del que aparentaba. Convenció a DreamWorks para que adquirieran sus derechos, pero el estudio puso una condición para estrenarla: volver a rodar la película con un presupuesto mayor.