El cartel de la Feria de Almería es un tema que suscita debate entre la ciudadanía edición tras edición. Como era de esperar, este mismo lunes se lanzaban las primeras críticas tachando el diseño de “muy sevillano”, o “poco almeriense”, por reflejar a la mujer vestida de flamenca y no con el traje de refajona tradicional de Almería. Otros afrontan el asunto desde el sentido del humor y apelando al ingenio. Por ejemplo, la cuenta Almería Shitposting (@almeriashitpost) que ha convocado un concurso de memes de la Feria de Almería 2019.

Según el cartel, un hombre puede orinarse fuera del váter por varios motivos: problemas de visión, temblores o altura, entre otros. Para este tipo de patologías, el hospital indica las diferentes consultas donde puede acudir para solucionarlos.

Un autor, una misma idea y muchos carteles. El diseñador gráfico Rubén Lucas, que firma el trabajo que anunciará la próxima Feria de San Juan de Badajoz, ha copiado la misma idea que utilizó para realizar otras obras que ha presentado y ganado en otros certámenes. Así, por ejemplo, ha sido el autor del cartel ganador que anunció el Carnaval de Albacete 2019, las fiestas de Burgos y un festival de teatro de Pineda de Mar.

Un seguidor del Alt-Right norteamericano intenta partir por la mitad un cartel con el siguiente mensaje "¡NO!, en el nombre de la humanidad nos negamos a aceptar una América fascista".

Un usuario de Twitter ha compartido en su perfil un maravilloso cartel que anuncia una junta de vecinos y los usuarios no dan crédito. En este folio colocado en un ascensor se puede leer los temas a tratar en dicha reunión de la comunidad.

“Me votas o al pilón” es el reclamo escogido por el candidato del PSOE en Castejón (Cuenca) (...) Pero parece que no a todo el mundo le ha hecho gracia el cartel del PSOE. La actual alcaldesa de Castejón, María Arribas, considera que ese eslogan esconde una amenaza velada. No piensa así el candidato socialista, que asegura que eso de “tirar al pilón” a los vecinos que no voten al PSOE no es una amenaza sino una broma de pueblo: “El voto es secreto”, justifica el candidato.

Los carteles y eslóganes electorales de las recientes elecciones generales, tenían el acabado inconfundible de las agencias de publicidad, y aun así muchos eran risibles. Pero cuando llega la hora de las municipales, se instala el “todo vale” en las candidaturas: Photoshops de parvulario, eslóganes paridos en un ‘brainstorming‘ de sol y sombra y fotos hechas en el salón de casa con el móvil de la parienta.

Parecía difícil superar el eslogan para las municipales del PSOE de Trabuco (Málaga): “El Trabuco que tú quieres”, pero el Partido Popular no es de amilanarse y ha puesto a las mejores mentes de su generación hasta encontrar el reclamo definitivo para los votantes de Tías (Lanzarote): “Centrados en Tías”. El cartel electoral viene ilustrado con la foto de Pancho Hernández, su sicalíptico candidato, amén de alcalde del municipio.

En las farolas de Sevilla han aparecido esta semana unos carteles ofreciendo “Clases particulares de matemáticas para votantes de Vox”. Entre las lecciones que promete la profesora anunciante están “Aprender a contar del 1 al 24”, “Entiende fácilmente la ‘media aritmética’” y “Aprende a calcular porcentajes”. Como colofón, se incluye el siguiente reclamo: “¡¡No hagas el ridículo!! ¡¡No dejes que los progres se rían de ti!!”

La 'pegada de carteles' es uno de los momentos más esperados de toda campaña electoral. Desde las primera elecciones libres en España en el año 77, la propaganda ha ido evolucionando en estos más de 40 años de democracia. Estos son algunos de los carteles más llamativos

Se ha hecho de rogar, pero por fin ya lo tenemos aquí. La organización de Woodstock 50 acaba de sacar a la luz el cartel de artistas que actuarán entre el 16 y el 19 de agosto en Watkins Glen (Nueva York) en la edición que celebrará el 50 aniversario del mítico festival estadounidense.

Se hacen llamar “Las Novias de La Unión”, la mayoría de ellas son habitantes de la colonia Morelos y La Guerrero. Regularmente se realizan cirugías estéticas. En ocasiones las pagan los miembros del grupo delictivo, pero en otras ellas mismas hacen lo que conocen como “tandas para el cirujano”; similar a cualquier tanda, así pagan sus operaciones.

Carmen Lomana es, posiblemente, lo último que el votante de Podemos espera encontrar en el cartel corporativo que anuncia el regreso de Pablo Iglesias ante una masa de personas deseosas de volver a ver a su líder en público. Pero ahí está. Ni es un efecto óptico, ni una persona que se parece a Carmen Lomana. Es Carmen Lomana.

Al frente de la comunicación de Podemos debe de haber un quintacolumnista, puede que un testaferro de Íñigo Errejón. Si no, no se explica el cartel anunciador de la vuelta de Pablo Iglesias tras tres meses de baja de paternidad: “VuELve. Pablo Iglesias se reencuentra con la gente”, con un “EL” destacado tipográficamente. Tal ha sido la estupefacción en las redes ante el cartel que Podemos lo ha eliminado de sus redes sociales y el propio Pablo Iglesias ha pedido disculpas en su cuenta de Twitter: "No me siento identificado con el cartel".

El cantante de Los Mojinos Escozíos regresa a su faceta de monologuista con 'La vida en rocanrol', donde cuenta cómo es su día a día.

El ínclito Hematocrítico popularizó hace ya unos cuantos años el concepto ‘Drama en el portal’, una divertidísima recopilación de carteles hallados en comunidades de vecinos de todo pelaje. Los portales y escaleras tienen algo en común con los baños públicos: unos y otros son espacios de uso compartido (muy a nuestro pesar) y, por tanto, sujetos a la llamada “tragedia de los comunes”: al ser de todos, no son de nadie y así lucen, los pobres.

Todo lo que no está prohibido está implícitamente permitido. O al menos así lo debió de entender un joven que, ni corto ni perezoso, se montó con su moto en un vagón del metro de Granada. El joven llegó a recorrer diez estaciones con la flamante scooter roja apoyada entre la pared y una de las puertas del vagón, ante el estupor del resto de los pasajeros. Al ser inquirido por un vigilante, se defendió con un inapelable: «Es que pone no fumar, no beber, no cruzar la vía y no pone que no se puede subir con la moto».

No llegó a las dos décadas, pero durante los aproximadamente 15 años que se extendió la denominada como Edad de Oro del porno, las películas X se consideraban un arte cinematográfico sin paliativos. Público, crítica y salas de cine convencional de Estados Unidos abrazaron los films con sexo explícito.Pensar que estas películas se hicieron hace medio siglo y que, incluso con una estética tan censurada (fueron muy controvertidas y en ocasiones prohibidas), solo nos hace reflexionar sobre el estado de la industria del porno “duro” en el siglo XXI.

Un cartel bilingüe en un banco público en el municipio de Gavà (Barcelona) advierte a los paseantes. En castellano: "Ojo, pintado!". Y en inglés: "Eye, painted!". En la parte inferior aparecen varios logos del ayuntamiento de Gavà.

¿Cómo acabar con esta lacra que amenaza los centros de nuestras urbes? ¡Mediante el fomento de la práctica del ‘balconing’ por parte de nuestros visitantes! Esta peregrina iniciativa es lo que propone el concepto ‘Balconing is Fun’. Se trata de una campaña callejera ejecutada por los autodenominados comités de autodefensa contra el barricidio y que, al igual que el famoso ‘Tourist Go Home’ (pero en camilla de ambulancia), aglutina a los movimientos alternativos de Barcelona en la lucha contra el turismo descontrolado en la Ciudad Condal.