Hace bien poco viví una experiencia que estoy casi seguro que va a ser la última vez que la viva. Normalmente, cuando hacemos algo o estamos en algún lugar no pensamos en que pudiera ser la última vez que la vivamos o la última vez que estemos allí, porque pensamos en la fácil posibilidad de repetir la experiencia o en la permanencia e invariabilidad de los lugares, aparte de que sólo nos lo podríamos plantear si la experiencia vivida o el lugar en el que estamos nos produce placer o buenos recuerdos. Como era más que consciente ...