Machacando a los periodistas de su país hasta someterlos, prometiendo herir a los enemigos de sus amos y lanzando noticias falsas, un médico de la Arabia Saudita cercano al joven príncipe heredero Mohammed bin Salman parece estar leyendo el manual de Steve Bannon. El viernes 18 de agosto, Saud al-Qahtani, también conocido como el Sr. Hashtag, asesor de medios de la corte real, lanzó en Twitter un llamamiento de McCarthyista a los saudíes para confeccionar una lista negra con los nombres e identidades de cualquiera que simpatizase con Qatar…

El momento escogido por el Tribunal Penal Especializado en Riad para hacer pública la ejemplarizante sentencia tuvo gran relevancia: apenas unos días después de que John Kerry, secretario de Estado de EEUU, país con el que el régimen saudí mantiene una alianza estratégica en Oriente Próximo, pusiera punto final a una visita a Arabia Saudí. Mohamed al Qahtani, el principal activista saudí de derechos humanos, un hombre de 47 años prematuramente envejecido y cuyas críticas han llegado a abordar temas considerados tabús en el opaco reino wahabí.

“Querida madre, voy a dejarlo por ti; adiós”. Así se despedía de sus 74.529 seguidores en Twitter la feminista saudí y conocida defensora de los derechos humanos Iman al Qahtani (@ImaQh). ¿Qué había pasado? Tras semanas de intimidación y acoso, los servicios secretos elevaron la presión amenazando con extender su hostigamiento a la madre de Iman. Su caso es sólo el último de una campaña contra las libertades de expresión y asociación, que pone de relieve el temor de las autoridades saudíes ante el creciente activismo en las redes sociales