Los desarrolladores y defensores de los reactores modulares pequeños (SMR) han propuesto que son una forma más económica y rápida de construir nueva capacidad de energía nuclear. Pero hasta la fecha ha habido poca evaluación independiente de cómo se compararían los desechos radiactivos producidos por los SMR con los de sus pares a gran escala. Lindsay Krall de la Universidad de Stanford en California descubrió que los SMR podrían aumentar el volumen de desechos de actividad baja e intermedia de vida corta hasta 35 veces.

Está fuera de lugar que en un tiempo en el que la tendencia es la de la demolición de viejas presas y la restauración de la dinámica natural de los cauces, se pretenda recuperar ésta antigua concesión, para explotar un ecosistema privilegiado y que además forma parte de un espacio protegido. ¿Aguantará el Escabas el envite o se convertirá en uno más de tantos ríos degradados por la acción del hombre? La Junta de Castilla la Mancha tiene la última palabra para que el interés general prevalezca sobre el beneficio de unos pocos.

El Consejo de Estado ha comprobado el incumplimiento de las condiciones de la concesión a Enel-Unión Fenosa Renovables de la presa de Barbellido, y recomienda su eliminación, después de que la Confederación Hidrográfica del Duero decidiera en septiembre la caducidad anticipada de la concesión de la minicentral hidroeléctrica situada en el Parque Regional de la Sierra de Gredos.

La autorización de nuevas minicentrales eléctricas supone un ataque contra el medio ambiente, según los ecologistas. La asociación ADEGA presenta alegaciones a un proyecto que pretende captar 10.000 litros/segundo de agua del río Eo en Ribeira de Piquín (Lugo). La iniciativa no tiene justificación pública y afecta a una zona Reserva de la Biosfera, indica la entidad.

Aún así, reconoce que los ríos gallegos están "saturados" y, por esa razón, la Consellería de Medio Ambiente no tramitará los otros 62 proyectos de minicentrales que se habían solicitado ni prevé autorizar nuevos embalses en el futuro a excepción de obras de ampliación o mejoras tecnológicas en los ya existentes. Sin embargo, el Gobierno gallego sí dará luz verde a los 31 embalses que fueron adjudicados en mayo de 2005, a pocos meses delas elecciones que situarían a la coalición PSOE-BNG en el poder y que paralizaron las minicentrales.

La Xunta procede a revisar los planes hidráulicos del anterior Gobierno con un objetivo claro: adjudicar nuevas minicentrales, a pesar de reconocer la saturación, levantando así el veto que estableció el bipartito a las hidroeléctricas en 2005. Grandes compañías, como Unión Fenosa, Ferroatlántica o Norvento se encuentran a la espera de que la Xunta dé luz verde a la construcción de las minicentrales.

En unos años España podría contar con pequeños 'reactores personales' de poco más de un metro de altura y de ancho. Una perspectiva que contradice las políticas energéticas del gobierno socialista. Cada uno de estas 'minicentrales' tiene capacidad para suministrar energía a 20.000 hogares. Su coste relativamente bajo, veinte millones de euros, su pequeño tamaño, los escasos residuos que produce y la comodidad de su ubicación - bajo tierra y con todo tipo de sistemas de seguridad- han logrado que una inmobialiaria española se interese por ellas.

La Consellería de Medio Ambiente mantiene bloqueada la tramitación de 26 minicentrales hidráulicas autorizadas por el anterior Gobierno. El departamento que dirige Manuel Vázquez defiende que el número de presas que soportan los ríos gallegos es excesivo y, por este motivo, no sólo no ha autorizado ni un sólo proyecto nuevo en los últimos tres años sino que intentará frenar aquellos aprovechamientos hidroeléctricos que habían sido admitidos por el anterior Ejecutivo y que aún no están en explotación