El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anuncia su intención de eliminar el sistema de pensiones de más de 900.000 empleados públicos mediante el desmantelamiento de estas prestaciones a partir del día 6 de octubre. Este nuevo sistema de pensiones provoca, de momento, reacciones dispares. La idea es derivar las competencias de Muface, Isfas y Mugaju a la Seguridad Social, de forma que las competencias de la Seguridad privada pasen a manos de la Administración pública.