La fascinante historia de Stonehenge acaba de complicarse un poco más. A comienzos de 2015, los arqueólogos encontraron un enorme círculo de piedras enterradas alrededor del monumento neolítico que conocemos. Lo llamaron Superhenge. Las primeras excavaciones de este círculo conocido han arrojado una sorpresa. Los grandes bloques enterrados no son piedras, sino postes de madera. Centenares de ellos.