Santander, Torrelavega, Granada, Villanueva del Río y Minas, Tocina, Sanlúcar de Barrameda, Sevilla, Jerez, Almería, Basauri y Tudela. Éstas son algunas de la ciudades españolas donde ya se han prohibido las atracciones de ponis en las fiestas populares, por las condiciones a las que son expuestos los animales, denunciadas por diversas protectoras y asociaciones de ecologistas.