Nadie contaba con ellas. No eran favoritas, pero Mirjam Ott, Carmen Schäfer, Carmen Küng, Janine Greiner y Alina Patz han conquistado el Mundial femenino de Lethbridge. Y lo han hecho de manera merecida. Suizas y suecas ya habían llegado al partido decisivo de forma justa y las de Ott han jugado una final vistosa y consistente que ha ido de menos a más y que les ha proclamado campeonas del mundo de curling.