La provincia canadiense de Columbia Británica ha declarado este miércoles el estado de emergencia por las inundaciones y deslizamientos de tierra que han dejado a miles de personas varadas y desplazadas, paralizado servicios esenciales y provocado al menos un muerto, aunque las autoridades esperan «confirmar más fallecimientos en los próximos días». En este contexto, las Fuerzas Armadas Canadienses se han desplegado para ayudar a los miles de residentes que han quedado atrapados, mientras voluntarios también auxilian a vecinos y animales.