Una investigación identificó "en los estados indecisos de Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte y Pensilvania... al menos 70 teóricos de la conspiración electoral trumpistas que actualmente trabajan como funcionarios electorales del condado que han cuestionado la validez de las elecciones o han retrasado o se han negado a certificar los resultados." De esos 70, 22 de ellos ya han "rechazado o retrasado la certificación" en elecciones pasadas recientes. Los republicanos se han negado a certificar 25 resultados desde 2020

Un panel favorable a Trump da forma a las nuevas normas electorales de Georgia en reuniones largas y a menudo caóticas. La Junta Electoral del Estado de Georgia trabajó una vez en relativa oscuridad. El cambio pone de relieve cómo la administración electoral se ha vuelto cada vez más escrutada y politizada, particularmente en Georgia y otros estados que el presidente Joe Biden volteó para los demócratas en 2020. El expresidente Donald Trump sigue afirmando sin pruebas que el fraude generalizado le costó las elecciones en Georgia.

El mensaje, cortesía del Fondo de Libertad Rudy Giuliani, vino con una representación completa de la propia foto de Giuliani de la oficina del sheriff en el condado de Fulton, Georgia

Las acusaciones contra Donald Trump en el caso de interferencia electoral presentado en Georgia buscan criminalizar el discurso político y el activismo protegidos por la Primera Enmienda, dijo el jueves un abogado del expresidente, al pedir que la causa sea desestimada. “No es solo que haya sido falsas. No es que el acusado haya sido llevado a un tribunal porque a la fiscalía no le gusta lo que dijo”, señaló Wakeford, y añadió que Trump es libre de expresar su opinión y realizar protestas legítimas.

La queja argumenta que Ellis debería perder su licencia legal porque rompió su juramento de defender la ley mientras trabajaba para revocar las elecciones después de que su jefe perdiera las elecciones de 2020. old.meneame.net/story/jenna-ellis-cuarta-persona-declara-culpable-inte

Un jurado de ocho personas en Washington, D.C. dictaminó el viernes que el ex abogado personal de Donald Trump, Rudy Giuliani, debe pagar casi 150 millones de dólares en daños y perjuicios a la madre e hija de los trabajadores electorales del condado de Fulton, Wandrea "Shaye" Moss y Ruby Freeman. El jurado otorgó más de 16 millones de dólares en daños compensatorios y 20 millones de dólares por la imposición intencional de angustia emocional a cada mujer. A Giuliani también se le impone el pago de 75 millones como indemnización punitiva.

"Obviamente no ganamos", una fuente citó a Meadows al decírselo al equipo de Smith en retrospectiva. Trump ha llamado a Meadows, uno de los asistentes más cercanos y de más alto rango del expresidente en la Casa Blanca, un "amigo especial" y "un gran jefe de gabinete, el mejor que uno pueda desear".

El expresidente pretende retrasar lo más posible su juicio y que su caso se vea separado del resto, mientras algunos de los otros 18 acusados, entre ellos su exabogada Sidney Powell, prefieren procesos rápidos

Los expertos advierten del "efecto escalofriante que la orientación personal puede tener en los miembros del jurado, en los votantes, en los funcionarios electos". "Es un problema grave", dijo Heidi Beirich, cofundadora del Proyecto Global contra el Odio y el Extremismo, a Salon. "Los nombres de estos miembros del gran jurado y otra información personal se han vinculado en sitios peligrosos, en particular 4chan. Ahí es donde se han publicado múltiples manifiestos terroristas y el sitio está lleno de supremacistas blancos y otros extremistas

Fani Willis, fiscal del condado de Fulton, tiene previsto presentar cargos contra el expresidente en las próximas semanas. “Hay un joven racista en Atlanta (…). Dicen que persiguió a cierta pandilla y acabó teniendo un amorío con el jefe de la pandilla o con un miembro de la pandilla”, afirmó Trump durante un discurso en New Hampshire el martes. “Es una persona que quiere procesarme. Tiene muchos problemas. Pero quiere procesarme para intentar postularse a algún otro cargo… Quiere acusarme por una llamada telefónica perfecta”