Un estudio publicado recientemente por biólogos de la Universidad de Berkeley muestra que también pueden existir casos de prolongada latencia donde las condiciones ambientales permiten la persistencia de cantos durante mucho tiempo. Es el extraordinario caso de unas aves paseriformes del género Cinnyris, también conocidas como “pájaros del sol de doble collar” que habitan en entornos montañosos a lo largo de África Oriental.