Cuando las madres dicen que la zanahoria es buena para la vista, no es sólo una estrategia para que nos la comamos. Su alto contenido en carotenoides protegen el ojo. Pero, aunque es el más popular, no es el único alimento que puede ayudarnos a evitar problemas visuales. El kiwi, las uvas rojas, el calabacín, la calabaza, las naranjas, el melón dulce, el mango, la papaya, la yema de huevo, el maíz y las verduras de hoja verde como el brécol, las espinacas o los guisantes son fuente de luteína y zeaxantinas.